El trabajo de ortodoncia es el uso de aparatos dentales o aparatos ortopédicos que aplican pequeñas cantidades de fuerza durante un largo período de tiempo a los huesos de la mandíbula y al posicionamiento de los dientes.
Los osteópatas capacitados y experimentados en el uso de la terapia manual osteopática, comprenden la importancia de la odontología ortodóncica como un medio para mejorar la alineación de la mandíbula y los dientes, y como un factor importante en la salud de las personas.
Muchos dentistas y oclusionistas reconocen la importancia del tratamiento osteopático como parte integral para ayudar al cuerpo a realizar una correcta ortodoncia y mantener una buena salud durante todo el proceso. Comprender estos beneficios mutuos, requiere entender la conexión entre los tratamientos osteopáticos y la ortodoncia. El mensaje general es que un enfoque colaborativo e interdisciplinario, a menudo puede producir resultados más rápidos y efectivos en el tratamiento del paciente.
¿Por qué tengo dolores e incomodidad?
La forma en que se desarrolla la mandíbula está muy influenciada por la función de los huesos craneales y nuestro desarrollo postural. El moldeado de los huesos de la cara y el cráneo, la posición de la cabeza sobre el cuello desde el nacimiento o el posicionamiento prenatal, pueden afectar al crecimiento y equilibrio del desarrollo de la mandíbula y, por lo tanto, el posicionamiento de los dientes. A menudo, la mandíbula se deprime en el proceso de nacimiento.
Cuando se implantan ‘Brakets’ a un cráneo, a veces no tienen el efecto deseado y provocan dolores e incomodidades. Éstos inhiben el movimiento de los huesos craneales individuales resultando en dolores de cabeza, mareos, irritabilidad, sinusitis, dolor de cuello y espalda e incluso trastornos neurológicos mayores. Además de estos efectos secundarios altamente indeseables, en estos casos los dientes pueden volver a su patrón tenso anterior una vez que se retira el aparato dental.
La disfunción de la cara y la parte superior del cuello pueden provocar maloclusión y síndromes de dolor craneofacial, como la disfunción temporomandibular (DTM). La Osteopatía Craneal tiene un papel definido en la detección de las causas de disfunción y en su tratamiento.
Un adecuado tratamiento osteopático, puede optimizar la posición de los dientes, al trabajar la posición de los huesos craneales y del cuerpo como un todo.
La correcta alineación de los dientes depende mucho de una correcta relación anatómica del maxilar superior con el maxilar inferior. Cambiar la alineación de los dientes requiere cambiar, no solo la relación del maxilar con la mandíbula, sino también las relaciones complejas de estos huesos con otros huesos de la cara y el cráneo.
La investigación osteopática demuestra que todas las partes donde se unen los huesos del cráneo (suturas craneales), tienen capacidades significativas de movimiento en la infancia y la niñez y, por lo general, se mantienen durante toda la vida. Aunque hay muy poco movimiento en estas articulaciones, ese movimiento es esencial para permitir una corrección de ortodoncia exitosa.
Osteopatía Craneal
Los osteópatas comprenden los pequeños movimientos que deben realizar los huesos de la cara y el cráneo para funcionar de manera saludable, para el drenaje y la circulación de la sangre, la linfa, los nervios, los senos paranasales y la nutrición del cerebro. El cráneo es una colección dinámica de huesos con más de 100 articulaciones a través de las cuales se producen micromovimientos. Los dientes son extensiones de los maxilares superior e inferior y se articulan directamente (o con un solo hueso intermedio) con todos los demás huesos de la cabeza.
También es importante considerar la posición del hueso de la mandíbula y su efecto en el resto del cuerpo. Si su cabeza se mantiene hacia adelante, hay más peso pasando por su cuello (es más probable un cambio artrítico) y la mandíbula retrocede. Por lo tanto, tratar la mandíbula puede mejorar la postura.
Algunos procedimientos dentales son mal tolerados por el cuerpo, por ejemplo, la extracción de muelas del juicio, ejercen fuerzas muy fuertes a través de algunos huesos delicados, lo que a veces puede provocar sinusitis, problemas de oído, dolores de cabeza, migrañas, dolor de cuello y espalda. Esto suele ocurrir algún tiempo después del procedimiento, incluso años después.
¿Como te puede ayudar un osteópata?
El tratamiento osteopático puede ayudar al cuerpo durante los cambios que se le imponen. Los pacientes a menudo notan una reducción del dolor, mayor comodidad y una mayor libertad de movimiento después de recibir un tratamiento osteopático.
Cualquiera que haya pasado por el proceso de ortodoncia, sabe que puede ser incómodo y en algunos casos bastante doloroso. El tratamiento osteopático puede ayudar con algunos de los efectos secundarios, como:
- Dolor de ATM
- Dolor de mandíbula
- Dolor de cuello y espalda
- Dolores de cabeza
- Maloclusión dental
- Mordidas cruzadas
- Interposición lingual
El tratamiento osteopático ayuda a la corrección ortodóncica, favoreciendo a todos los huesos del cráneo a adaptarse a los cambios ortodóncicos creados.
A través de la terapia manual osteopática, el osteópata puede ayudar a las personas a tolerar mejor los cambios de ortodoncia, y también a alertar al dentista sobre la posible necesidad de ajustar los ‘brakets’. No es raro encontrar que cuando el tratamiento osteopático acompaña a la ortodoncia, los resultados deseados se obtienen en la mitad o dos tercios del tiempo estimado por los dentistas, y es más probable que la corrección se mantenga bien con el tiempo.
Los osteópatas pueden tratar todo el cuerpo, incluida la cabeza y la cara. Es aconsejable tratarte con un osteópata después de la aplicación de la ortodoncia o si se han realizado ajustes en el aparato de ortodoncia. La osteopatía craneal implica movimientos suaves de equilibrio de los huesos, músculos y ligamentos y es muy adecuada para ayudar al cuerpo a adaptarse a medida que cambia el arco dental. El tratamiento osteopático tiene como objetivo aliviar cualquier tensión en los músculos de la cara y el cuello, reducir el dolor y permitir que la cara y la mandíbula se adapten más rápido a los nuevos cambios. Los osteópatas examinarán y tratarán cualquier disfunción en los músculos que afecten la mandíbula, las vértebras del cuello, la parte superior de la columna y los huesos de la cabeza y la cara.
Ortodoncia tradicional y funcional
Nuestros osteópatas trabajan tanto con el enfoque tradicional de la ortodoncia como con el enfoque funcional y tratamos tanto a adultos como a niños.
El osteópata ayuda a detectar y corregir problemas subyacentes
Si estás a punto de ponerte un aparato de ortodoncia, o está en el proceso de hacerlo, siempre es recomendable una visita a un osteópata craneal. Al corregir los problemas subyacentes antes de que comience la terapia dental, cualquier cambio en la mecánica y los dientes tendrá menos efectos sobre el resto de partes de la cabeza. Los pacientes experimentarán menos efectos secundarios, ya que el resto del mecanismo craneal se adapta más fácilmente a los cambios, la mordida corregida permanece estable y hay menos molestias.
Algunos procedimientos dentales son mal tolerados por el cuerpo, por ejemplo, la extracción de muelas del juicio, ejercen fuerzas muy fuertes a través de algunos huesos delicados, lo que a veces puede provocar sinusitis, problemas de oído, dolores de cabeza, migrañas, dolor de cuello y espalda. Esto suele ocurrir algún tiempo después del procedimiento, incluso años después.
Los osteópatas craneales comprenden los pequeños movimientos que deben realizar los huesos de la cara y el cráneo para funcionar de manera saludable, para el drenaje y la circulación de la sangre, la linfa, los nervios, los senos paranasales y la nutrición del cerebro. El cráneo es una colección dinámica de huesos con más de 100 articulaciones a través de las cuales se producen micromovimientos. Los dientes son extensiones de los maxilares superior e inferior y se articulan directamente (o con un solo hueso intermedio) con todos los demás huesos de la cabeza.
También es importante considerar la posición del hueso de la mandíbula y su efecto en el resto del cuerpo. Si su cabeza se mantiene hacia adelante, hay más peso pasando por su cuello (es más probable un cambio artrítico) y la mandíbula retrocede.
Más vale prevenir que curar y cuanto más temprana sea la manipulación osteópatica, menos dolorosa y más rápida será la corrección con ortodoncia.
Si tienes dudas, consultas o deseas obtener más información sobre osteopatía craneal y odontología,
El trabajo de ortodoncia es el uso de aparatos dentales o aparatos ortopédicos que aplican pequeñas cantidades de fuerza durante un largo período de tiempo a los huesos de la mandíbula y al posicionamiento de los dientes.
Los osteópatas capacitados y experimentados en el uso de la terapia manual osteopática, comprenden la importancia de la odontología ortodóncica como un medio para mejorar la alineación de la mandíbula y los dientes, y como un factor importante en la salud de las personas.
Muchos dentistas y oclusionistas reconocen la importancia del tratamiento osteopático como parte integral para ayudar al cuerpo a realizar una correcta ortodoncia y mantener una buena salud durante todo el proceso. Comprender estos beneficios mutuos, requiere entender la conexión entre los tratamientos osteopáticos y la ortodoncia. El mensaje general es que un enfoque colaborativo e interdisciplinario, a menudo puede producir resultados más rápidos y efectivos en el tratamiento del paciente.
¿Por qué tengo dolores e incomodidad?
La forma en que se desarrolla la mandíbula está muy influenciada por la función de los huesos craneales y nuestro desarrollo postural. El moldeado de los huesos de la cara y el cráneo, la posición de la cabeza sobre el cuello desde el nacimiento o el posicionamiento prenatal, pueden afectar al crecimiento y equilibrio del desarrollo de la mandíbula y, por lo tanto, el posicionamiento de los dientes. A menudo, la mandíbula se deprime en el proceso de nacimiento.
Cuando se implantan ‘Brakets’ a un cráneo, a veces no tienen el efecto deseado y provocan dolores e incomodidades. Éstos inhiben el movimiento de los huesos craneales individuales resultando en dolores de cabeza, mareos, irritabilidad, sinusitis, dolor de cuello y espalda e incluso trastornos neurológicos mayores. Además de estos efectos secundarios altamente indeseables, en estos casos los dientes pueden volver a su patrón tenso anterior una vez que se retira el aparato dental.
La disfunción de la cara y la parte superior del cuello pueden provocar maloclusión y síndromes de dolor craneofacial, como la disfunción temporomandibular (DTM). La Osteopatía Craneal tiene un papel definido en la detección de las causas de disfunción y en su tratamiento.
Un adecuado tratamiento osteopático, puede optimizar la posición de los dientes, al trabajar la posición de los huesos craneales y del cuerpo como un todo.
La correcta alineación de los dientes depende mucho de una correcta relación anatómica del maxilar superior con el maxilar inferior. Cambiar la alineación de los dientes requiere cambiar, no solo la relación del maxilar con la mandíbula, sino también las relaciones complejas de estos huesos con otros huesos de la cara y el cráneo.
La investigación osteopática demuestra que todas las partes donde se unen los huesos del cráneo (suturas craneales), tienen capacidades significativas de movimiento en la infancia y la niñez y, por lo general, se mantienen durante toda la vida. Aunque hay muy poco movimiento en estas articulaciones, ese movimiento es esencial para permitir una corrección de ortodoncia exitosa.
Osteopatía Craneal
Los osteópatas comprenden los pequeños movimientos que deben realizar los huesos de la cara y el cráneo para funcionar de manera saludable, para el drenaje y la circulación de la sangre, la linfa, los nervios, los senos paranasales y la nutrición del cerebro. El cráneo es una colección dinámica de huesos con más de 100 articulaciones a través de las cuales se producen micromovimientos. Los dientes son extensiones de los maxilares superior e inferior y se articulan directamente (o con un solo hueso intermedio) con todos los demás huesos de la cabeza.
También es importante considerar la posición del hueso de la mandíbula y su efecto en el resto del cuerpo. Si su cabeza se mantiene hacia adelante, hay más peso pasando por su cuello (es más probable un cambio artrítico) y la mandíbula retrocede. Por lo tanto, tratar la mandíbula puede mejorar la postura.
Algunos procedimientos dentales son mal tolerados por el cuerpo, por ejemplo, la extracción de muelas del juicio, ejercen fuerzas muy fuertes a través de algunos huesos delicados, lo que a veces puede provocar sinusitis, problemas de oído, dolores de cabeza, migrañas, dolor de cuello y espalda. Esto suele ocurrir algún tiempo después del procedimiento, incluso años después.
¿Como te puede ayudar un osteópata?
El tratamiento osteopático puede ayudar al cuerpo durante los cambios que se le imponen. Los pacientes a menudo notan una reducción del dolor, mayor comodidad y una mayor libertad de movimiento después de recibir un tratamiento osteopático.
Cualquiera que haya pasado por el proceso de ortodoncia, sabe que puede ser incómodo y en algunos casos bastante doloroso. El tratamiento osteopático puede ayudar con algunos de los efectos secundarios, como:
- Dolor de ATM
- Dolor de mandíbula
- Dolor de cuello y espalda
- Dolores de cabeza
- Maloclusión dental
- Mordidas cruzadas
- Interposición lingual
El tratamiento osteopático ayuda a la corrección ortodóncica, favoreciendo a todos los huesos del cráneo a adaptarse a los cambios ortodóncicos creados.
A través de la terapia manual osteopática, el osteópata puede ayudar a las personas a tolerar mejor los cambios de ortodoncia, y también a alertar al dentista sobre la posible necesidad de ajustar los ‘brakets’. No es raro encontrar que cuando el tratamiento osteopático acompaña a la ortodoncia, los resultados deseados se obtienen en la mitad o dos tercios del tiempo estimado por los dentistas, y es más probable que la corrección se mantenga bien con el tiempo.
Los osteópatas pueden tratar todo el cuerpo, incluida la cabeza y la cara. Es aconsejable tratarte con un osteópata después de la aplicación de la ortodoncia o si se han realizado ajustes en el aparato de ortodoncia. La osteopatía craneal implica movimientos suaves de equilibrio de los huesos, músculos y ligamentos y es muy adecuada para ayudar al cuerpo a adaptarse a medida que cambia el arco dental. El tratamiento osteopático tiene como objetivo aliviar cualquier tensión en los músculos de la cara y el cuello, reducir el dolor y permitir que la cara y la mandíbula se adapten más rápido a los nuevos cambios. Los osteópatas examinarán y tratarán cualquier disfunción en los músculos que afecten la mandíbula, las vértebras del cuello, la parte superior de la columna y los huesos de la cabeza y la cara.
Ortodoncia tradicional y funcional
Nuestros osteópatas trabajan tanto con el enfoque tradicional de la ortodoncia como con el enfoque funcional y tratamos tanto a adultos como a niños.
El osteópata ayuda a detectar y corregir problemas subyacentes
Si estás a punto de ponerte un aparato de ortodoncia, o está en el proceso de hacerlo, siempre es recomendable una visita a un osteópata craneal. Al corregir los problemas subyacentes antes de que comience la terapia dental, cualquier cambio en la mecánica y los dientes tendrá menos efectos sobre el resto de partes de la cabeza. Los pacientes experimentarán menos efectos secundarios, ya que el resto del mecanismo craneal se adapta más fácilmente a los cambios, la mordida corregida permanece estable y hay menos molestias.
Algunos procedimientos dentales son mal tolerados por el cuerpo, por ejemplo, la extracción de muelas del juicio, ejercen fuerzas muy fuertes a través de algunos huesos delicados, lo que a veces puede provocar sinusitis, problemas de oído, dolores de cabeza, migrañas, dolor de cuello y espalda. Esto suele ocurrir algún tiempo después del procedimiento, incluso años después.
Los osteópatas craneales comprenden los pequeños movimientos que deben realizar los huesos de la cara y el cráneo para funcionar de manera saludable, para el drenaje y la circulación de la sangre, la linfa, los nervios, los senos paranasales y la nutrición del cerebro. El cráneo es una colección dinámica de huesos con más de 100 articulaciones a través de las cuales se producen micromovimientos. Los dientes son extensiones de los maxilares superior e inferior y se articulan directamente (o con un solo hueso intermedio) con todos los demás huesos de la cabeza.
También es importante considerar la posición del hueso de la mandíbula y su efecto en el resto del cuerpo. Si su cabeza se mantiene hacia adelante, hay más peso pasando por su cuello (es más probable un cambio artrítico) y la mandíbula retrocede.
Más vale prevenir que curar y cuanto más temprana sea la manipulación osteópatica, menos dolorosa y más rápida será la corrección con ortodoncia.
Si tienes dudas, consultas o deseas obtener más información sobre osteopatía craneal y odontología,
